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| Clausura XXVI Congreso | |
El Sindicato de Médicos de Atención Primaria de Aragón (FASAMET y CESM Aragón)ha dado a conocer este sábado las principales conclusiones del XXVI Congreso Aragonés de Atención Primaria que se ha celebrado durante tres días en el Hotel Boston de Zaragoza
1. Los Médicos de Atención Primaria deben tener total libertad en la prescripción de tratamientos, con el único límite de su responsabilidad y de la “lex artis”.
2. Deben desaparecer las trabas administrativas establecidas por el Departamento de Sanidad en la implantación de nuevos fármacos (anticoagulantes orales y la nutrición enteral), en los que el paso previo de autorización por especialistas solo ocasiona demora en la instauración del tratamiento y sobrecarga en sus consultas, cuando el seguimiento clínico lo realiza el Médico de Atención Primaria.
3. Reconocemos la importante labor que realizan todos los profesionales sanitarios que participan en el proceso terapéutico (médicos, farmacéuticos y enfermeros) y pedimos a la Administración claridad en todas sus resoluciones para buscar como único fin el beneficio de los pacientes y la sostenibilidad del sistema.
4. Los nuevos cambios normativos aprobados por el Gobierno en los meses precedentes han originado un gran retroceso en la asistencia sanitaria para españoles, europeos e inmigrantes, resucitando el concepto de asegurado y beneficiario. El Sistema Nacional de Salud, como lo conocemos, sigue siendo inviable a pesar de los recortes sufridos. Los médicos tenemos que dar, al menos, esperanza a todos los pacientes porque, aunque en ocasiones la enfermedad no tenga tratamiento, el enfermo siempre lo tiene.
5. El trabajo conjunto entre atención primaria y hospitalaria en Geriatría, así como en el resto de especialidades, se configura como necesario a la hora de afrontar con eficacia y eficiencia los múltiples problemas de nuestros pacientes mayores, detectando precozmente los signos de alerta en una relación fluida entre ambos niveles asistenciales. Se hace necesario mantener más la calidad de vida que la disminución de la mortalidad, en especial si ésta se acompaña de un incremento de la morbilidad y de la dependencia funcional que además sobrecarga la propia sostenibilidad del sistema.
6. Uno de los grandes cometidos de la atención primaria es la prevención; para la prevención primaria del riesgo cardiovascular es necesaria la utilización de alguna de las tablas que valoran dicho riesgo. La evidencia científica demuestra que es imprescindible actuar de forma conjunta sobre todos los factores de riesgo (obesidad, tabaquismo, diabetes, hipertensión y dislipemia). Disminuir de forma individual, aunque sea intensa, los factores más evidentes no consigue el objetivo deseado y esa actuación es menos eficiente.
