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El Monasterio de Veruela acoge, hasta el próximo mes de septiembre, la exposición “Manolo Escobar. El apasionante vicio de coleccionar”, en la que el popular artista muestra su pasión por el arte contemporáneo y el coleccionismo.
La exposición fue presentada en la Diputación Provincial en una rueda de prensa en la que estuvieron presentes el presidente, Javier Lambán, el coleccionista Manolo Escobar y el comisario de la muestra, Fernando Castro Flórez.
Se trata de una muestra que inició su andadura en la localidad zaragozana de Ejea de los Caballeros, relacionada con la experiencia 'Enseñarte' y por segundo año consecutivo, lo que se ha expuesto en Ejea se va a poder ver en Zaragoza, explicó Javier Lambán.
El comisario, Fernando Castro, definió a Manolo Escobar como una figura “decisiva” en la cultura española en las últimas décadas, por su faceta como artista y también por su labor de coleccionista.
Según aseguró, el coleccionismo es para Manolo Escobar “un vicio que se comienza en el bolsillo de un niño cuando empieza a coleccionar» objetos «y a ordenarlos», de manera que una colección se convierte «en un proyecto de vida» en el que «las obras hacen guiños de complicidad» a sus coleccionistas y se establece entre ambos «una relación de seducción».
Las cerca de 2.000 obras que integran la colección del artista son una revisión de lo que ha sucedido desde los años 70 hasta la actualidad en el mundo del arte, de forma que el público que acuda a Veruela “se va a encontrar con esa visión apasionada del arte» que marca la vida de Manolo Escobar.
Por su parte, Manolo Escobar indicó que “quiere” a su colección “como un padre que quiere a un hijo». En cuanto a su pasión por el coleccionismo, reconoció no tener “ni idea» de donde pudo surgir aunque recordó que siempre se había sentido atraído por los dibujos, y posteriormente, por la pintura.
Sobre los movimientos artísticos, comentó que le gusta toda clase de pintura, siempre que el cuadro le interese, y por eso, para comprar una obra, «tiene que tener algo de Manolo Escobar, y la que me llega procuro hacerme con ella».