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El reflejo del Pilar | JOSÉ ANTONIO DUCE |
Los zaragozanos sabemos bien que el Pilar no sólo no se toca, sino que está siempre presente. Por eso también lo está en la nueva entrega de la serie fotográfica «La Ciudad Soñada», de José Antonio Duce. El artista aragonés capta esta vez el reflejo del templo desde la calle Espoz y Mina.
Toda la capital aragonesa siente, de una manera o de otra en cada uno de sus rincones la influencia de su inmueble más famoso y uno de los más queridos. El Pilar está en el corazón de los zaragozanos y por eso se puede intuir al final de cada calle, detrás de cada muro, doblando cualquier esquina. En la imagen de Duce lo vemos reflejado en la luna de un automóvil situado en la calle Espoz y Mina.
Esta céntrica vía no es la más cercana a la basílica y sin embargo la fotografía de Duce consigue captar la esencia del templo. El cristal del coche atrapa y muestra la gallardía de dos de las torres del Pilar, que se elevan por encima de los muros, del tiempo y del espacio, para acompañar y cuidar a la capital aragonesa.
El templo observa paciente el discurrir de la historia de Zaragoza y Duce consigue congelar uno de esos instantes y darle forma gráfica a través de la última entrega de esta serie de imágenes. Una estampa en la que comparten protagonismo la basílica, las calles de la ciudad y uno cualquiera de sus ciudadanos disfrutando de vivir en la capital del Ebro.