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| Monumento a «los caídos» | JOSÉ ANTONIO DUCE |
El fotógrafo José Antonio Duce, en su serie sobre la Zaragoza de hace medio siglo, muestra en esta ocasión un monumento que no ha desaparecido, pero sí ha sido trasladado a otro lugar. Se trata del homenaje franquista a sus fallecidos en la Guerra Civil española, erigido inicialmente en la Plaza del Pilar y que ahora preside el acceso principal al cementerio de Torrero
Duce muestra en esta fotografía un recoveco más que lucía en los años cincuenta la plaza más famosa y querida de Zaragoza, la del Pilar. Muchas son las obras artísticas que podemos encontrar en este lugar. Junto a ellas, un elemento que no pasaba inadvertido era el monumento “a los caídos” levantado en honor a los fallecidos del bando franquista durante la Guerra Civil. La construcción fue propuesta por el entonces alcalde de la ciudad Francisco Caballero, y tras varios proyectos inviables, se terminó en 1954 y fue colocada en el lugar que ahora ocupa la fuente de la Hispanidad.
Un decreto del dictador Franco de 1938 establecía que figurara una inscripción en cada parroquia con el nombre de los fallecidos en la guerra pertenecientes a su bando. Ese fue el origen de la colocación de placas en las iglesias y monumentos conmemorativos de este tipo. En la fotografía aparece la parte de trasera de dicha obra, una construcción rematada con una cruz que se trasladó al cementerio de Torrero en 1990, con motivo de la remodelación de la plaza del Pilar.
Esta imagen en blanco y negro destaca por el juego de luces y sombras utilizado por el genial autor y por la vestimenta e inocente imagen de los niños frente a la barbarie de la contienda civil que representa el monumento sobre el que están sentados.
