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La Federación de Barrios de Zaragoza (FABZ) manifiesta su más rotunda oposición a la recalificación de los suelos del colegio Jesús y María, en el barrio del Carmen, para construir viviendas de precio libre. Los promotores pagarán los aprovechamientos públicos que marca la ley en dinero. La entidad vecinal reclama otras opciones de equipamientos en el barrio del Carmen.
Particularmente en el caso del antiguo colegio de Jesús y María, hemos de recordar que desde hace doce años, 12, los vecinos del barrio, la AVV Puerta del Carmen, y la propia FABZ, vienen reclamando la reconversión de dicho espacio en equipamientos y zonas verdes para el barrio. La última vez, en el mes de febrero de 2007, el año pasado, cuando TODA la Junta de Distrito lo reclamó y votó unánimemente en tal sentido. También en las últimas reuniones celebradas entre los vecinos y el alcalde de la ciudad se les aseguró que, de realizarse algún tipo de permuta o convenio, los equipamientos demandados serían “entregados llaves en mano”.
Estas demandas tiene toda la justificación social y urbanística: se trata del sector de la ciudad con el mayor índice de densificación, a lo que corresponde la ABSOLUTA falta de zonas verdes en todo el barrio: desde la plaza del Carbón a la Ciudad Universitaria no hay ni UNA zona verde, ni un jardín, ni una plazuela digna de tal nombre. En parecidos, si no idénticos, términos podemos hablar en cuanto a equipamientos sociales, educativos, sanitarios, etc. El centro municipal del antiguo cuartel de Hernán Cortés, también convertido en pisos, hace tiempo que está saturado; no hay centros de asistencia a mayores (a pesar de ser también uno de los barrios más avejentados de la ciudad) no hay una Casa de Juventud, ni un Centro Cívico…
Ante esta situación, plasmada también y cuantificada en los estudios municipales y el propio Plan General de Ordenación Urbana que seguía manteniendo su calificación como equipamiento, es evidente que los vecinos y los técnicos municipales de Urbanismo vieran en esos suelos la oportunidad de aprovecharlos como el “esponjamiento” de una zona tan saturada, y dotación de los equipamientos deficitarios (o al menos una parte de ellos).
Ahora, con el convenio que pretende firmar el Ayuntamiento, nada de esto es posible, sino que, al contrario, sólo suponen un aumento de la aglomeración de vivienda. Creemos que la fórmula de permuta de esta pastilla por otra en una zona de nueva construcción hubiese sido la opción más adecuada como se ha plantado en otros casos en otros barrios de la ciudad. No entendemos que mientras el Ayuntamiento baraja terrenos para decenas de miles de viviendas en el extrarradio de la ciudad, no haya utilizado la vía de la permuta o cualquiera otra para, para satisfacer las necesidades de los vecinos y de la ciudad. Debemos remarcar que no se trata de un espacio cualquiera de la ciudad, sino del pleno centro de la misma. Por todo ello rechazamos rotundamente este convenio y reclamamos que se cumplan los acuerdos de la Junta Municipal del distrito y las prescripciones del PGOU.
