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A lo largo de la historia los parajes del Pirineo aragonés han constituido espectaculares y sobrecogedores lugares míticos y misteriosos. Uno de ellos es el Parque Natural de Ordesa y Monte Perdido, integrado en la Red de Parques Nacionales, que cuenta con el Aneto, el pico más alto de los Pirineos.
Allí podemos disfrutar de su flora y su fauna y de deportes de riesgo como rafting-kayak o barranquismo. Además, cuenta con un turismo rural muy desarrollado gracias a sus hoteles, hostales, apartamentos, campings y refugios.
Su ruta más clásica es la del Sector Ordesa y está recomendada para personas que no están muy bien preparadas físicamente, por lo que es la más concurrida. Discurre por la Pradera de Ordesa y pasa por la cascada de Cotatuero, la de Arripas, de la Cueva y del Estrecho, Gradas de Soaso o el espectacular Circo de Soaso. El recorrido completo lleva aproximadamente tres horas a través de senderos bien indicados y sin nada de peligrosidad.
