El Real Zaragoza ya está al borde del descenso

Roberto Fabián Ayala

El Valladolid adelanta al Zaragoza en la tabla clasificatoria, tras vencer por 2 a 1 en su estadio. Los de Villanova no jugaron a nada, y el arbitraje acabó por colocar la lápida al conjunto aragonés. Los maños, con este resultado, se colocan con los mismos puntos que el Recreativo, primer equipo en puestos de descenso, y ven el pozo de Segunda División cada vez más cerca.

El Zaragoza estuvo rácano durante casi todo el partido, sólo al final cuando el resultado era casi un empujón al pozo del descenso, mejoró en su juego. El Valladolid dominó aunque careció de profundidad. El colegiado ayudó a los de Mendilibar al señalar un penalti dudoso de Paredes sobre Llorente, que supuso el empate. Y la anulación de un gol legal de Sergio García arrebató a los blanquillos el único punto que podían haberse llevado de Zorrilla

Villanova ha logrado su objetivo de fortalecer la defensa de un equipo que recibía muchos goles, pero el refuerzo en el centro del campo ha dejado a Milito huérfano, y más, sin poder contar con la genialidad del muy añorado Aimar, o del tan esperado Matuzalem. Pero aún con todo en contra, la pegada de los blanquillos es algo a tener en cuenta. Un buen centro del canterano Valero, toca Milito dejándola para que Zapater finalizara con acierto.

Los de Pucela, lejos de acusar el golpe, insistieron, pero no andaban finos de cara a los 3 palos. Pero para eso estaba Lizondo Cortés. El árbitro señaló penalti en una caída más que dudosa de Llorente ante la entrada de Paredes. Víctor marcó el empate, y del banquillo del Zaragoza salía Celades, se había acabado el ataque, amarrar el empate le pareció bueno al técnico maño.

El Valladolid siguió con lo suyo y tuvo su recompensa. Un buen centro de Sesma desde la izquierda era rematado por Llorente para adelantar a los pucelanos. Por si no fuera suficiente con la derrota, Lizondo anuló un tanto legal de Sergio García. La impotencia de Juanfran explotaba poco después. El lateral se ensaño con Capdevila, brutal patada la del valenciano. Lizondo no falló en ese momento, agresión, y a la calle.

El Zaragoza parece que sólo se salvará por la incapacidad de los de abajo. Ya ni siquiera juega bien pero sufre en defensa, ahora defiende bien pero no sabe tratar el balón. No todo fue culpa del colegiado, es cierto que tuvo cierto protagonismo, pero fue la incapacidad de los blanquillos lo que condujo a la derrota.