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Sergio García y Alberto Zapater |
El Real Zaragoza consigue con su victoria por uno a cero ante el Deportivo salir temporalmente de los puestos de descenso. Los resultados de sus rivales determinarán si sigue salvado de la caída a Segunda División el domingo. Los de Villanova vencieron al Depor, que no se encontró en todo el partido, con un gol de Ayala en el tiempo añadido.
Ayala finalizó el partido llorando y dedicando el gol a los que “están sufriendo”. Y bien dedicado. El Real Zaragoza salió como no lo ha hecho en toda la Liga, dentro del partido, con la vista fija en la portería del contrario y atacando como una manada de lobos. Al final obtuvo recompensa, pero la afición tuvo el alma en vilo todo el encuentro; parecía que Aouate había traído un par de ángeles de la guarda para evitar la derrota.
Sergio García volvió a destacar en el cuadro blanquillo. Regateó, le puso en bandeja las bolas a Oliveira, remató, sólo le faltaba bajar a defender con los centrales. El Deportivo de la Coruña no jugó un mal partido, pero los maños parecían leones y los gallegos no pudieron dar en ningún momento más que ellos. Un partido discreto del que no se llevaron un punto de milagro.
La bola no quería entrar, Aouate guardaba su puerta como si del legendario cancerbero se tratara y los tres palos fueran el camino al infierno. Pudo ser, pero al final el guardameta coruñés tuvo un fallo en una falta botada por Matuzalem, que acabó en el pie de Sergio García, que envió atrás para que Ayala marcara su primer tanto como zaragocista y probablemente uno de los más importantes de su carrera. El argentino acabó llorando, de alegría y de frustración. Los aragoneses veían la luz al final del túnel.
El Valencia espera la visita de los blanquillos y no está en una situación en la que vaya a hacer muchos regalos. El descenso sigue cerca y puede seguir siendo el hogar del Zaragoza esta semana, pero en la Romareda nadie olvidará la lucha y el coraje de los de Villanova este sábado.