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El público en el momento del lanzamiento de los 6.000 euros |
Una multitud acogió el estreno de “Las gafas de Angelino” con gritos de “tira el dinero” o “danos el dinero ya”. Miles de personas apelotonadas en la plaza de Fuentes de Ebro, la localidad natal del compañero de Carmen Alcayde que da nombre al nuevo programa de Tele 5, esperaron durante más de una hora el momento del lanzamiento de los 6.000 euros. Cuando el cañón lanzó los 1.200 billetes al aire, gritos y empujones sustituyeron los vítores al joven presentador.
La promesa de repartir 6.000 euros atrajo a muchos a tierras aragonesas. Una señora de Barcelona, que tuvo que coger varios autobuses para llegar a Fuentes de Ebro, afirmaba que venía, única y exclusivamente, para el reparto de dinero. Los vecinos se asomaban a los balcones para ver cómo su plaza mayor se llenaba de forasteros, que buscaban el suculento premio.
La localidad zaragozana acogía un espectáculo nunca visto en sus calles. Se estrenaba un programa de televisión, uno de sus habitantes era el protagonista y habría conexiones en directo, en la misma plaza del pueblo. Plataformas con cámaras y un escenario, como en las fiestas patronales, se metieron en el centro de su pueblo de un día para otro.
Entre el público, destacaba una mujer que llevaba una máscara de calavera, muy macabra, para que nadie reconociera sus facciones en la tele. Muchos niños corrían entre la gente y se colocaban al lado del escenario. Y sobre el mismo, el cañón que lanzaría los más de 1.000 billetes de 5 euros, sobre los asistentes. Los bares que rodeaban la plaza mostraban un buen número de clientes, en su mayoría foráneos que buscaban un bocata para comer o un café para pasar la espera.
Salvador, uno de los jóvenes que acompañan a Angelino en el programa, ejercía de maestro de ceremonias y animaba a los asistentes a gritar el nombre del joven. La gente acompañaba los gritos con saltos y palmadas, según les indicaba el presentador. Paraguas vueltos del revés, caza mariposas y algún invento casero se observaban entre la multitud, todo por atrapar más billetes que el resto.
“Las gafas de Angelino” se acercaba a su final, el lanzamiento del dinero estaba por llegar y algunos gritos se elevaban desde la masa de gente: “tira el dinero” era el más común. Se avisó de la existencia de niños en la plaza y se pidió cuidado para no causarles daños. Pero ellos mismos se colaban y se ponían en primera fila, obviando los avisos. Un padre que decidía marcharse buscaba a sus hijos; al no encontrarlos pedía al presentador poder llamarlos por el micro. Salvador lo permitía y el padre gritaba a sus niños que se iban, con cierto aire de enfado.
Cuando llegó el anuncio del lanzamiento, la multitud comenzó a empujar. Los primeros billetes abandonaron el tubo, y los asistentes se lanzaron como locos por el dinero. Empujones, saltos en el aire, algún codazo y sobre todo, muchos gritos. El viento, elevaba los premios, y los lanzaba contra una fachada cercana, los vecinos recibían una compensación, a cambio de sufrir delante de su hogar este espectáculo de codicia.
Menos de cinco minutos después, el dinero se acababa y los que habían conseguido un buen botín mostraban una sonrisa. La mayoría no consiguió más de un par de los billetes de cinco euros que se repartieron, pero parecía que eso no importaba demasiado, casi todos reían, y pocos se lamentaban.
4 Comentarios. Dejar nuevo
Menudo espectáculo bochorno y qué manera de reírse de la gente… Vaya imagen damos de Aragón en el resto de España, a tortas por cuatro duros